Fortalecer el turismo en el centro de Medellín, especialmente en La Candelaria, conectando a visitantes y comunidad a través de recorridos que rescatan la historia, la cultura y la identidad del Distrito Candelaria.
Ser la marca referente en turismo cultural del centro de Medellín, reconocida por inspirar orgullo local y proyectar a La Candelaria como un destino vibrante y esencial en la memoria de la ciudad.
La importancia cultural de La Candelaria trasciende sus muros antiguos y plazas históricas: es el alma viva de Medellín. En sus calles conviven la memoria y la identidad paisa, expresadas en la arquitectura patrimonial, los cafés tradicionales, las galerías de arte y los espacios culturales que han revitalizado la zona.
El distrito es escenario de recorridos turísticos, festivales de arte urbano y manifestaciones culturales que mantienen viva la historia de la ciudad, conectando generaciones a través de la música, el teatro y la palabra.
La Candelaria no es solo el lugar donde Medellín nació, sino donde su espíritu sigue renovándose día a día, recordando que toda gran ciudad se construye sobre la fuerza de sus raíces
Representa a la diosa madre de la mitología muisca, considerada la progenitora de la humanidad según las creencias indígenas precolombinas.
Símbolo fundamental de la identidad colombiana: su lucha por la independencia y su visión de unidad latinoamericana han inspirado generaciones y generaciones.
Fue un prócer clave de la Independencia y un puente entre ciencia, política y diplomacia, cuya obra ayudó a cimentar la identidad cultural y republicana de Colombia.
Es uno de los patrimonios más antiguos de Medellín, construido a inicios del siglo XIX. Su arquitectura combina estilos neoclásicos y góticos, convirtiéndolo en un referente urbano. Fue centro religioso y educativo, y hoy es un espacio cultural abierto a la ciudadanía. Representa la memoria histórica y la identidad de la ciudad.
Construido desde 1803, fue sede central de la universidad durante gran parte del siglo XIX y XX. Su arquitectura neoclásica lo convierte en un referente histórico y urbano de la ciudad. Declarado Monumento Nacional en 1982, simboliza la tradición educativa y cultural antioqueña. Hoy, restaurado, sigue siendo un espacio de memoria, encuentro y proyección cultural en la ciudad.
Es uno de los templos de ladrillo cocido más grandes del mundo. Construida entre 1890 y 1931 en estilo neorrománico, es un ícono arquitectónico de Medellín. Ubicada en el Parque de Bolívar, ha sido centro espiritual y cultural de la ciudad. Fue declarada Basílica Menor en 1948 y Monumento Nacional por su valor histórico. Hoy representa un símbolo de identidad y del patrimonio cultural colombiano y paisa.