Bienvenido a La Candelaria, el alma viva de Medellín. Historia, arte y transformación se encuentran en cada esquina.
En el corazón de Medellín late La Candelaria, el distrito donde nació la ciudad. A orillas de la quebrada Santa Elena, en el siglo XVII, se asentaron los primeros pobladores que dieron origen a la Villa de Nuestra Señora de la Candelaria, reconocida oficialmente en 1675 por una Real Cédula.
Con el tiempo, este pequeño poblado se transformó en el eje urbano del valle de Aburrá: su plaza mayor (hoy el Parque de Berrío) y la iglesia que lleva el mismo nombre se convirtieron en centro de la vida social, política y religiosa de la región.
Durante los siglos XVIII y XIX, La Candelaria vivió una época de esplendor, con calles bulliciosas, arquitectura colonial y un floreciente comercio. Aunque en el siglo XX sufrió un proceso de deterioro, hoy el distrito renace como símbolo de memoria y cultura, combinando historia, arte y tradición en cada una de sus calles, donde aún se respira el espíritu con el que comenzó la historia de Medellín.